jueves, 23 de agosto de 2012

Pintando con creyones de cera

El paisaje con creyones de cera es una técnica fácil y divertida, que permite obtener resultados aceptables en corto tiempo. Hice algunos bocetos, como apuntes de color empleando creyones. Más adelante me servirán para trabajos mayores y más acabados. El creyón tiene la ventaja de componer, dibujar y colorear al mismo tiempo. Esto es bueno cuando se tienen muchas ideas y hay que expresarlas rapidamente.
Con el creyón se obtienen distintos tipos de texturas y acabados. En estos trabajos lo usé muy empastado y encima de ellos froté con mis dedos, un algodón y otras cosas. También hice rasgados con la punta de una espátula.

Francisco Rivero. Atardecer. 2012.  




La montaña ofrece muchas posibilidades para componer y estudiar el color.

FRancisco Rivero. la quebrada, 2012.
En este pasisaje de arriba la técnica del rasgado es fundamental para crear esa sensación de transparencia y vaporosidad en el primer plano.

Francisco Rivero. marina. 2012
En esta marina de gran fuerza y dramatismo el amarillo del cielo contrasta de manera violenta con el azul del mar.

Francisco Rivero Bajando hacia la laguna. 2012
Un paisaje frio de montaña. sirvió de motivo para este apunte tarbajadoa  base de grandes manchas de color con raspaduras.

jueves, 21 de junio de 2012

Colegio Colinas de Bello Monte


 


Era el año de 1966. Para poder  continuar mi bachillerato y mi hermana menor su cuarto grado, mi familia tuvo que hacer el sacrificio de colocarnos en  colegios privados que, si bien  cercanos,  resultaban bastante caros. Estudié el tercero y cuarto año del bachillerato en  el Colegio Colinas de Bello Monte.
Este era un plantel  atendido por un grupo de españoles que se había separado de la  orden de La Salle. Su director era el Profesor Villanueva y el subdirector era Nieto, quien se tomaba muy en serio su trabajo y se encargaba del orden y la disciplina.
Estaba ubicado en una vivienda vieja sobre una colina que dominaba el valle de Caracas y que había pertenecido a la familia del Libertador. Creo que luego fue la casa de la hacienda Bello Monte. No tenía suficiente espacio ni buenas instalaciones deportivas, por lo cual extrañaba mi liceo de Maracay. Yo hubiese preferido asistir a un liceo público pero fue imposible. En aquel entonces existía solo un liceo en el este de la ciudad, el Gustavo Herrera.
En esa institución tuve la suerte de contar con el  Profesor Gustavo Homerlein, un docente venido de Cuba, quien se dedicaba de lleno a sus alumnos. A él le debemos muchas cosas, como hablar correctamente en público, debatir ideas y un conocimiento amplio de los clásicos españoles. Leímos a fondo La Celestina, el Quijote y otras obras y las discutimos en clase.
De aquel grupo de compañeros del Colinas de Bello Monte conservo recuerdos gratos. En primer lugar un maracucho vecino y compañero de nombre Douglas Manzano. En  especial de Julio Graterol, quien tenía un carro viejo que se lo habían regalado sus padres y que lo manejaba furtivamente, pues no tenía la edad reglamentaria. Con él y otros íbamos de paseo, en viejo Borward Isabella,  hasta  Las Mercedes a saborear  los famosos helados Frapé y también unos ricos Hotdogs  con  salsa alemana. También conocí a muchos jóvenes de procedencia española, como Antonio Casas, Ramiro y José García. Igualmente unas lindas muchachas como Ludmila   y  la  rubia y espigada Rocío quien salía en Venevisión bailando ballet. Al italiano Luigi Speranza un gigantón de buen carácter.  A César  Sánchez Paris y su hermana los recuerdo como muy aplicados  estudiantes. Por cierto que Cesar se graduó de matemático en la UCV, fue compañero y colega mío como profesor en la Facultad de Ciencias, hasta que se nos fue en el año 2011.
Una mistad entrañable fue la de un  vecino  y compañero  de estudio,  un  joven   de origen yugoslavo de nombre Nicolás  Luger, que vivía enfrente de mi casa.  Éramos grandes amigos y su familia me tenía mucho aprecio. Nicolás era un tipo especial por su personalidad fuera de serie. Le gustaba coleccionar animales disecados y mantener en su casa babas y reptiles pequeños. Como no le gustaba la televisión nos llevábamos muy bien.
No dispongo de fotos de aquella época. Hice este pequeño dibujo de memoria. La pintura es la única arma que poseo en contra del olvido. El colegio estaba situado en una colina y desde allí se divisaba toda Caracas, con el majestuoso Ávila al fondo. No sé si todavía existe o lo derrumbaron para hacer más edificios. Quisiera que alguien me suministrara una foto de aquel lugar entrañable de juventud. Años de oro.
Colegio Colinas  de Bello Monte

martes, 17 de abril de 2012

Un bongo remonta el Arauca.



Un bongo remonta el Arauca.


Un bongo remonta el Arauca bordeando las barrancas de la margen derecha.  Así comienza la famosa novela Doña Bárbara de Don Rómulo Gallegos, publicada en 1929. Una obra esencial y de obligatoria lectura para todos los que quieran comprender  la manera de ser y el alma del venezolano.  

Doña Bárbara es la novela venezolana más popular: desde su aparición, en 1929, se leyó con avidez quizás porque entre líneas Gallegos expresaba su rebeldía al régimen dictatorial de Juan Vicente Gómez y al atraso que vivía el país. La novela examina el tópico sociológico, de raíz positivista, civilización frente a barbarie en la vida venezolana rural.
Wikipedia.

Estoy leyendo de nuevo esta maravillosa novela que entre otras cosas, describe con emoción el vasto paisaje del Llano Colombo- Venezolano. Es una novela universal que narra la lucha de la civilización contra la barbarie. Un ideal de aquella época, que hoy habría que ver y revisar con cuidado.


Un bongo remonta el Arauca. 2012

Tres ríos..




El Arauca. Francisco Rivero.
El Arauca. Francisco Rivero.




¡De más allá del Cunaviche, de más allá del Cinaruco, de más allá del Meta. De más lejos que nunca!  De allí salió Doña Bárbara.  ¿Cuántos compatriotas conocen estos lugares? Seguramente muy pocos.
Son tres río que recorren el sur de la llanura de oeste a este y desembocan en al Orinoco. En sus orillas revolotean las garzas entre los chaparrales. Son ríos llaneros pero se alimentan del agua de la cordillera andina.



De más allá del Cunaviche. 2012.


Que Grande es Venezuela. 

Qué grande es Venezuela, piensa uno. Que pasaje tan majestuoso por su grandiosidad  y a la vez desolado podía ver desde la ventanilla de mi asiento. Apenas conocía una pequeña parte de mi país y ahora se develaba ante mis ojos un territorio infinito, desconocido y misterioso.

El Acarigua, el Guanare, el Masparro, el Boconó, el Santodomingo son ríos llaneros. Todos ellos  sedientos en el verano hasta que llega el invierno y engrosan su caudal con las lluvias. Se salen de sus cauces, anegan las vegas de las riberas, causan estragos en los poblados con las inundaciones. En invierno, cuando trabajan de manera  incesante  moviendo  rocas y arrastrando montañas de   arena hacia el sur del país son temerarios. Ahora son corrientes de aguas mansas que se fugan perezosamente de la tierra seca que quiere tragárselos, serpenteando entre matas, esteros  y medanales.

Hay muchos ríos, tierras fértiles, sol en abundancia en toda esta región, todo lo que se necesita para un gran desarrollo industrial y agropecuario pero esta región duerme en el abandono. Por estas tierras la civilización casi no avanza. A medida que nos movemos hacia occidente volvemos al pasado con las imágenes de  atraso y barbarie. Es la Venezuela de Doña Bárbara, la que se resiste a desaparecer, la que  se rebela en contra de cualquier intento de orden y planificación. La gente también es pesimista y apática por influencias del medio ambiente. Se conforman y viven con lo necesario. Es como viajar en un túnel del tiempo. 


El caño del río. Francisco Rivero.
El caño del río. Francisco Rivero.



Entre el llano y la Montaña.





Entre llano y montaña. Francisco Rivero.
Entre llano y montaña. Francisco Rivero.


Puente sobre el río Boconó.






martes, 20 de marzo de 2012

La Loca Luz Caraballo



En el mes de agosto los páramos se engalanan con el aroma de las flores. Es una eclosión maravillosa de colores que impacta la retina y crea, por unos instantes, una sensación de extasis y locura. En el cuadro de abajo utilicé patrones de simetría del grupo p2. Estos diseños presentan una simetría de rotación de ciento ochenta grados. Es una patrón abstracto inspirado en las formas y colores de la ecología tan especial de estas cumbres tropicales.



La loca Luz caraballo. 2012


La poesía es fuente inagotable de inspiración para la música y la pintura. El Poeta venezolano Andrés Eloy Blanco expresó de manera magistral el espíritu de aislamiento, pobreza y atraso en las poblaciones de los Andes Venezolanos, durante los primeros años del siglo XX, en una obra que lo ha inmortalizado. Ha sido llamado desde entonces El Poeta del Pueblo Venezolano, por su verso fácil de entender, profundamente humano y de gran valor artístico.
Palabreo de la Loca Luz Caraballo

                                
                De Chachopo a Apartadero       
                caminas, Luz Caraballo,
                con violeticas de mayo,               
                con carneritos de enero;            
                inviernos del ventisquero,         
                farallón de los veranos,               
                con fríos cordilleranos,
                Entre  riscos y ajetreos,               
                se te van poniendo feos             
                los deditos de tus manos.          
                                 
                La cumbre te circunscribe          
                al solo aliento del nombre,        
                lo que te queda del hombre     
                que quien sabe dónde vive;     
                cinco años que no te escribe,   
                diez años que no lo ves,             
                y entre golpes y traspiés,           
                persiguiendo tus ovejos,            
                se te van poniendo viejos          
                los deditos de tus pies.
                                 
                El hambre lleva en sus cachos  
                algodón de tus corderos,           
                tu ilusión cuenta sombreros     
                mientras tú cuentas muchachos;            
                una hembra y cuatro machos,  
                subida, bajada y brinco,              
                y cuando pide tu ahínco              
                frailejón para olvidarte,              
                la angustia se te reparte:            
                uno, dos, tres, cuatro, cinco.    
                                 
                Tu hija está en un serrallo,         
                dos hijos se te murieron,           
                los otros dos se te fueron          
                detrás de un hombre a caballo.               
                Loca Luz Caraballo-          
                dice el decreto del Juez,             
                porque te encontró una vez,    
                sin hijos y sin carneros,
                contandito los luceros:
                ..seis, siete, ocho, nueve, diez...            

lunes, 19 de marzo de 2012

La pintura plana.

Muchos artistas de la generación Post Impresionista, como Paul Gaugin, Henri  Matisse, Pierre Bonnard, Tolouse Lautrec y otros  “descubrieron” la decoración con figuras planas como un medio de dar mayor expresión al color. Copiaron sin reserva alguna el arte de japonés, los dibujos de los niños y las artesanías  de los pueblos primitivos, no europeos. También es el caso de algunos pintores en  Alemania y Austria como  Gustav Klimt, Kandisnky, Macke y otros que llevaron sus creaciones por los derroteros del art Deco, Art Nuveau, arte abstracto, rayonismo  y otras tendencias.
La pintura plana, sin sombras ni perspectiva con patrones de repetición es la base del diseño gráfico moderno o pintura con computadoras. Es una arte virtual, pasajero y  barato que no es objeto del mercado, pues es fácilmente repetible. En realidad, más que pinturas son líneas de instrucciones para un software que pinta en la pantalla. UN procesador matemático que colorea los pixels. En este sentido, está más cercano a la ciencia que al arte.
Hoy veremos algunas pinturas planas hechas con patrones de repetición que pertenecen al grupo de simetrías cm. ES un grupo sin rotaciones pero donde hay una reflexión y un deslizamiento o glading.
La Churuata. 2012.

La churuata es una vivienda comunal de los indiios del amazonas. Son amplias, freescas y muy agradables.

25 de diciembre 1959. 2012.
Las tela de cuadritos con que se hacen las camisas de los vauqeros es una de mis patrones favoritos. Es alegre, juvenil y combina bien con casi todo. ¿ Por qué ha pasado de moda?Cuando eramos niños nos gustaba disfrazarnos de vaqueros. En 1959 el niño jesús me trajo un par de pistolas y unas botas. Yo jugaba con mis amigos a las aventuras de Hopalong Kassidy, John Wayne, Cisco KId, Roy Rogers y otros vaqueros legendarios.

Playa Chévere. 2012.

La foto de arriba y el mensaje siguiente las robé del Twitter de Kassandra Rodríguez. " MI amor la playa estuvo chévere. Yo y Jeysson estábamos solitos".

Un buen bronceado. 2012.
¿ Qué ve Usted? ¿La figura en amarillo o las miles de figuritas negras?

Paisaje andino. 2012.

UN patrón de rpetición japonés sirve como fondo de nubes para este paisaje tranquilo y apacible.

sábado, 24 de diciembre de 2011

La Contradanza: El baile de Aricagua

La gente de antes bailaba la Contradanza con esmero y dedicación especial. Hoy solo quedan algunos vestigios, perdidos en las entrañas de las montañas andinas. Es una versión venezolana del famoso baile que se originó en Inglaterra ( Country Dance), atravesó el canal de la Mancha, pasó por Francia y llegó a estas tierras americanas, primero a Cuba y luego salta a Tierra Firme. Es un baile de cuadros parecido al minue, pero para la gente del campo, su ritmo es más alegre y movido.
He visto en algunas lugares bailar una contradanza estilizada, con un refinamiento amanerado y de salón, como si fuese un minue o un vals de etiqueta. Estas versiones edulcoradas de viejas tradiciones campesinas, además de ridiculas,  son de muy mal gusto.  Es un absurdo, producto de bailarines y escenógrafos de valses vieneses,  que no investigan, pues se trata de un baile de campesinos.
Vean estos niños con que naturalidad bailan, con que gracia se mueven, disfrutenlo y aprendan señorres...


Aricagua es un lindo pueblo del sur del estado Mérida, Venezuela en donde se baila la antigua, genuina, la  verdadera Contradanza. En el siguiente video presentamos un paseo que parte de la zona del Morro, un pueblo sobre el lomo de una montaña como montando a caballo. Vemos el cañón profundo del río Nuestra Señora, río este que forma un valle transversal a la cordillera, bastante erosionado y que nace en una laguna cercana al Pico Bolívar. Desde allí se asciende al filo de la montaña que divide las aguas de dos grandes cuencas hidrográficas, la del Lago de Maraciabo, que desemboca en el Mar Caribe y la cuenca del río Aricagua, que ofrenda sus aguas al Caparo, río caudaloso que desemboca en el Apure, el segundo río más largo de Venezuela, afluente del Poderoso Orinoco y que , como todos sabemos, desemboca en el Oceano Atlantico. Cuando llegamos al punto más alto, en la capillita de la Virgen,  donde se produce el divorcio de las aguas, vimos un árbol cuyas hojas pueden caer de un lado y de otro. Nacen juntas pero por el azar ellas pueden ir a parar a miles de Kilómetros de diferencia. Esto ilustra bien la Teoría matemática del caos, sensibilidad de las condiciones iniciales.
Luego la población de Aricagua con su paisaje de un  verde perenne. Aricagua posee reservas forestales de gran belleza en donde hay muchas orquídeas y otras epìfitas. Vemos a nuestros pies pasar su río con suaves meandros, y más alla reclinado en  un repecho de la montaña el poblado,  con su iglesia sencilla de blancos muros y torre cuadrada; y la Unidad Educativa Bolivariana Francisco Uzacátegui Dávila. Al final del video observamos la selva nublada, por donde se abre paso la esctrecha carretera que serpentea y un puente de hierro sobre el río Aricagua.

sábado, 21 de mayo de 2011

El dulce idilio de una lechoza con cuatro plátanos.

Las frutas maduras ponen el color en la naturaleza. La  papaya o lechoza (como se conoce en Venezuela) es una sinfonía  policromática de delicados matices que van desde el verde selvático más intenso, pasando por el ocre de los caminos polvorientos  y el amarillo candela, hasta los rojos más sensuales que se puedan tener bajo la  luz del sol. Es una fruta de gran tamaño cuyo interior va creciendo poco a poco, se hincha como el vientre de una mujer preñada y al romperse nos deja ver el misterio de sus negras semillas cubiertas de un mucilago brillante y transparente. Su pulpa carnosa, abundante y generosa es suave y rosada, de gusto delicado: apenas un poco ácida, con un ligero toque azucarado que acaricia el paladar.  Muy pocos saben  que sirve para curar las ulceras estomacales.

Lechozas, plátanos y naranja. 2003.
Aquí en esta obra hecha con lápices de colores, cuatro plátanos, dos lechozas y una naranja sirven de motivo para un bodegón tropical.
Desde  las tierras bajas de las montañas andinas hasta la gran planicie del Lago de Maracaibo se cultiva la sabrosa lechoza. Allá, en medio de una naturaleza ubérrima rodeada de aire caliente y vaporoso, cargado de humedad tropical se reproducen los lechozos  a placer.  Entre las hileras de las matas de plátano se dan muy bien, junto a las ramas esbeltas de los cacaoteros ( Theobroma cacao), los zapotes (Pouteria sapota), los jugosos nísperos ( Manikara achras) y el dulce guanábano ( Annona muricata).
Lechozas y naranjas. 2003.